ARTE Y CIENCIA : MATEMÁTICAS Y ASTRONOMÍA

Número Pi (π)
La letra π (pi) tiene su origen en el alfabeto fenicio y se asocia con una letra protosinaítica llamada peh que significa boca. El famoso 3,1416 recibió el nombre Pi por primera vez de manos del matemático William Oughtred y etimológicamente proviene de "περιφέρεια" (periferia) y de "περίμετρον" (perímetro). Este número, que es a la vez irracional y trascendente, consiste en la estrecha relación que existe entre la longitud de una circunferencia y su diámetro, por consiguiente, contiene una definición puramente geométrica. Geometría en griego "γεωμετρια" significa medida de la tierra y, de acuerdo con Herodoto, se originó en Egipto fruto de la necesidad y la práctica de medir los límites de las parcelas inundadas por el Nilo. Esto suponía el conocimiento de los fundamentos de la trigonometría o cálculo de triángulos mediante una cuerda que dividían en doce partes hasta formar un triángulo rectángulo. De igual modo, la geometría para Platón era "el conocimiento de lo que siempre es" y la que ayudaba a contemplar la esencia de las cosas. Y no sólo eso, sino también la que atraía hacia lo verdadero al formar en ella el espíritu filosófico y dirigía "a lo alto sus miradas, en lugar de abatirlas, como suele hacerse sobre las cosas de este mundo".

Telescopio y cometa
Del griego ἀστρονομία (astronomía) se compone de ἄστρον (astron, "estrella") y νόμος (nomos, "ley") . Se considera a Hiparco como el padre de la astronomía aunque fue Aristarco de Samos el primero que propuso una teoría heliocéntrica del Sistema Solar. Respecto al primer telescopio es difícil de concretar, pero su origen que reside en la cámara oscura tenemos, por un lado, a Roger Bacon (1214-1294) que da testimonio en su Ciencia Perspectiva de haber situado un espejo inclinado delante del agujero de la cámara para proyectar las imágenes verticalmente sobre una pantalla horizontal y, asimismo, hacia el 1550 Gerolamo Cardano (1501-1576) que recomendaría un disco de cristal biconvexo adosado al mismo. De la misma forma, G.B. Della Porta sugirió también enderezar la imagen mediante un espejo cóncavo, invención que se le atribuye igualmente al astrónomo florentino Egnatio Danti (1537-1586). No obstante, quien nos consta que intentó hacer una teoría de la lente fue Della Porta en 1593 y posteriormente, Daniele Barbaro demostró que se podía obtener una imagen más brillante colocando una lente en el orificio de entrada, que en este caso se trataba de una lente convergente. Todas estás técnicas fueron aplicadas posteriormente por Thomas Harriot, Galileo y por Kepler para poder enfocar así con el "tubo dióptrico" a los cielos, revelando detalles inauditos como las manchas solares y una nueva concepción de la naturaleza que era totalmente desconocida.